viernes, 25 de enero de 2008

El derecho a decidir




¿tengo derecho a decidir? Yo no he nacido por mi propia decisión, sino por el acuerdo de mis padres que decidieron engendrarme. Cuando estoy en casa quiero decidir, pero resulta que mi mujer también quiere hacerlo y entonces, buscando la paz familiar, discutimos, pactamos y llegamos a una decisión consensuada.

Tengo dos hijos y ellos también quieren decidir, discuten no se ponen de acuerdo entre ellos y menos aun con mi mujer y conmigo. Nuevamente se impone la necesidad de discutir y llegar a acuerdos consensuados entre todos.

Además de todo esto vivo en una casa donde hay muchos vecinos y cada cierto tiempo nos reunimos en la Comunidad de Propietarios. Y, claro yo quiero decidir una cosa, pero si la mayoría no está de acuerdo, tengo que acatar esa decisión.

Si desde estas células familiares y vecinales, pasamos al Ayuntamiento, a la Provincia, a la Comunidad Autónoma, al Estado, a la Comunidad Europea... mi derecho a decidir queda integrado en el derecho a la representación que doy con mi voto en las correspondiente elecciones.

¿qué esta ocurriendo entonces?. Que yo tengo derecho a decidir y que por tanto me gustaría decidir los impuestos que voy a pagar, o la educación que quiero, o el tipo de servicios públicos que espero, las leyes que a mi me interesaría promulgar, etc. Pero, el gran problema es que mi derecho a decidir tiene límites, condiciones y reglas democráticas (mi derecho termina donde empieza el derecho de la persona que tengo en frente). Y además de todo esto,como libre y voluntariamente he votado y he dado un derecho de representación, tengo que atenerme a las reglas democráticas.
Dicho esto, deseo hacer alusión al diálogo que propone Ibarretxe y que consiste en el derecho a decidir del pueblo vasco, sin límites ni condiciones. Imaginemos que hipotéticamente el pueblo vasco decidiera apartarse del estado e incorporarse a la Comunidad Europea. ¿no creen Vdes. que lo que estará haciendo entonces, es decidir el derecho a enajenar su derecho para trasladarlo a Bruselas?.
Porque claro, me imagino que dentro de ese derecho de decisión estará el acatar las Directivas Comunitarias, o las decisiones del Banco Central Europeo, o en definitiva todas las decisiones que se adopten en el Parlamento Europeo. O, estoy yo equivocado y lo que el pueblo vasco pretende es dar la espalda a las decisiones comunitarias y fijar a su libre albedrío, por ejemplo el precio del petróleo, o las políticas agrícolas y pesqueras, o el mercado eléctrico, o los tipos de interés del Banco Central Europeo, etc.etc. porque para eso no es necesario integrarse en Europa.

Tal y como lo veo yo, lo que pretende el Sr.Ibarretxe, es decidir el futuro del pueblo vasco, en soledad, sin ningún tipo de interferencia externa, y dando la espalda al 50% o mas de la sociedad vasca que está pagando sus impuestos en los territorios históricos y que también quiere decidir, pero quiere hacerlo junto con otros ciudadanos españoles que viven en Asturias, en Aragón, en Castilla, o en Castalapaya de Arriba.

Tengo la sensación que lo que pretende el nacionalismo es que se reconozca que solo ellos son el pueblo vasco y que cuando alcancen el derecho a decidir van a ser magnánimos y comprensivos con los otros ciudadanos que quieren su futuro unido al de otros ciudadanos españoles. Y para ello, hasta nos van a dejar hablar español, pero eso sí, en la escuela obligatorio hablar euskera. Resulta evidente que, el derecho a decidir que se persigue, implica impedir, recortar y condicionar la libertad de otros, y esto a todas luces no es justo.

¿por qué de una vez por todas en vez de tanto hablar del derecho a decidir, empezamos a hablar del derecho que tenemos todos los ciudadanos a una convivencia pacífica, a que e respete el derecho a ser y a pensar de modo diferente, a pactar y a negociar democráticamente?.

Concluyo diciendo, mi derecho a decidir termina donde empieza el derecho a decidir de la persona que tengo en frente.

6 comentarios:

  1. "L'État ce moi":
    -Nunca la pretendida Euskadi fue Estado, Reino,Principado, Marquesado, Condado,.., sólo algún "Señorio", salvo Navarra que fue el último reino que se integró en la España de los Reyes Católicos, hace ya cinco siglos (1512).
    -A lo largo del siglo XIII las denominadas provincias vascas hispanas(Alava, Vizcaya y Guipúzcoa) se intregaron, voluntariamente, en el reino de Castilla manteniendo sus "fueros",y formando parte inseparablemente, de su identidad histórica: así se forjaron grandes personajes en la marina,ejército, literatura,y el "cuasi" monopolio hereditario y muy meritorio de Secretarios reales.
    -En el País Vasco, aunque el voto nacionalista es menor del 50%(esperemos que IU recobre el sentido), el deseo independentista no llega al 30% según encuestas fiables pero, además, ese territorio, a estos efectos, no es políticamente vasco sino constitucionalmente nacional.
    -Es decir, un hipotético Referéndum de independencia debería ser, además de convocado expresa y sólo por el Gobierno Nacional, extensible a todos los ciudadanos españoles con derecho a sufragio: imaginemos el resultado.
    -Ya no hay vascos "puros", los del RH negativo sabiniano y arzallusiano, por efectos seculares de invasiones, emigraciones,.., sino soló en sentido administrativo por nacimiento y/o empadronamiento.
    -Que decir de la lengua, el euskera, que sólo una minoría habla de forma tradicional y flúida, a pesar de lo esfuerzos costosísimos del singular gobierno autonómico.
    -Los nacionalismos son anacrónicos e insaciables: separan, dividen, crean desigualdades,.., por no hablar, en este caso, de la violencia asesina de ETA, que recrudece la cuestión y la presión en términos antidemocráticos.
    -Hablar, negociar, pactar,...,si, pero para llegar a un único fin, el suyo: autodeterminación.
    -Ver al Lendakari al frente de una manifestación masiva y orquestada contra las Instituciones del Estado-Tribunal Supremo, en este caso- por la sentencia contra Atuxcha es inaudito: ¡quien representa al Estado contra él!.
    -Realmente ya dijo que "El Estado soy yo", el de su Comunidad, naturalmente.
    -Y Zapatero, sus Vices-una jurista, su "epígono" Pepe Blanco,.., mudos: esperamos una referencia de apoyo al Supremo y rechazo a las otras manifestaciones.

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  2. Estoy totalmente de acuerdo contigo, el pais vasco forma parte del Estado Españól como el resto de las provincias,afortunadamente, y el Sr. Ibarretxe no deberia perder tanto tiempo en intentar convencer a los ciudadanos, para que le apoyen en su absurdo camino hacia una independencia, que confío que no consiga, por el bien de todos, y dedicar ese tiempo a otros problemas más importantes, como el terrorismo, el trabajo, la salud, la vivienda, todos ellos necesitan más dedicación para mejores soluciones que las que hay.
    Es una gran pena que no tengamos un partido en la oposición lo suficientemente fuerte, para que luche contra el nacionalismo,que como acertadamente tú dices solo nos lleva a épocas de nuestros ancestros.
    Sí, creo que deberia haber una ley que no permitiera, "apalancarse" a los partidos,en su mandato deberian moverse, (como el dinero )cada cierto tiempo, como hacen en EE.UU., nos daría la opción de conocer las diferentes maneras de dirigir un país, y en cosecuencia a la hora de votar no se tendría tanto miedo a lo desconocido.

    ¿Si el voto nacionalista es menor al 50% como es posible que no los podamos quitar de sus poltronas? entiendo desde mi desconocimiento que tendria que ser suficiente para que no se pusieran la corona.
    Estamos como en la época de los feudales, un señor(no una ley) que decide lo que "sus" labradores pueden decidir, es decir, tienen una libertad dirigida por su "señor", no me extrañaria que dentro de poco, se erigieran con el derecho de pernada.Un saludo

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  3. Una errata ¿perdonable? por aquello del idioma.
    El título correcto de mi Comentario sería:
    "L'Etat c'est moi".
    Aprovecho para promocionar mi Blog orientado a la política (como esta Entrada) y a la historia, ya recomendado en este Blog Hispadata:
    www.desdelcentro.blogspot.com
    Saludos.

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  4. Hay una interesante prgunta al hilo de la tuya que me permito introducir y que en una ocasión un filósofo muy cercano al nacionalismo no termino de aclararme.

    ¿Cúal es la unidad mínima con capacidad para, o derecho a, decidir? ¿O cúal debería ser esta?

    La respuesta es esecial para esa otra gente que no comparte el proyecto del lehendakari y quiere buscar un camino diferente.

    Pensemos en Álava, por ejemplo. ¿Debería Álava tener derecho a ser Comunidad Autónoma independiente en una Euskadi fuera de España? ¿Y el pueblo de Laguardia?

    El problema es que, indefectiblemente la respuesta que he obtenido a esa pregunta ha sido siempre la que más se adapta a los intereses de la parte, según hipotéticos estudios y resultados.

    Un saludo.

    PS: También estan bien de vez en cuando estos off topic...

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  5. Totalmente de acuerdo con D. Antonio Checa y con su entrada D. Guillermo Díaz. Quería responder a David Maeztu. En mi humilde opinión, no existe una unidad mínima para determinar el derecho a decidir, porque simplemente éste no existe, no está consagrado en sí en la DU DDHH, Convenio de Viena ni ningún tratado Internacional. El significado como tal, creo que entonces sólo puede enfocarse en dos maneras, como soberanía popular o como autodeterminación. Si se enfoca de la primera forma, una soberanía del pueblo vasco, ésta ya está reflejada en la votación en el Parlamento vasco,los Estatutos, competencias, partipación en reférendum, existencia de los partidos políticos, etc. Existe pues una verdadera soberanía popular vasca al igual que el resto del conjunto de la española. En cuanto a si se interpreta como una libre determinación, o autodeterminación, al fin y al cabo se trata de la independencia del conjunto del estado español, con la diferencia de que internacionalmente no es posible. La libre determinación, jurídicamente, es sólo posible respecto a colonias frente a los imperios coloniales, para ello se creó el fideicomiso y el Consejo de Adm Fiduciaria. pero el problema vasco atentaría contra el principio internacional de integridad del estado. por lo tanto, el derecho a decidir no existe ni está consagrado jurídicamente como tal, y sólo se trata, en mi opinión, de un eufemismo mal utilizado de la independencia y de un mal entendido significado de la autodeterminación.

    Saludos

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